Ilustración :Angela Carrasco

domingo, 19 de abril de 2009

A volar por Belong

Los tacones y a volar. La ciudad.

Isabel es una amiga de mi madre. Viene a casa de vez en cuando. Alguna tarde entre semana, mientras hago los deberes escucho divertida lo que le cuenta a mi madre de su trabajo. Pero el mejor día es la tarde de domingo, cuando se queda conmigo para que mis padres vayan al cine. Sólo nos quedamos en casa si llueve porque a Isabel lo que le gusta de verdad es pasear, andar por las calles.

Todos los domingos lleva tacones. Dice que ella me regalará los primeros zapatos de tacón cuando tenga edad. Cuando andamos me explica las calles. Dice que en el edificio que está frente a nosotros, en esa esquina, había una fonda y allí vivió un poeta que era muy pobre y para colmo de males murió en otra pensión, lejos de aquí. Dice que en el parque en el que la rosaleda es más grande que toda mi casa, se hicieron novios sus abuelos. Que en aquella callejuela, una mula agonizaba porque una bomba había herido su pata y la gente salió de sus casas con cuchillos para cortarle la carne cuando aún estaba viva. Dice que se pasó mucha hambre. Dice, que el zoológico también cabía en un parque y estaba dentro de la ciudad. Dice que en ese patio de colegio jugó por primera vez a las canicas. Dice que en esa avenida llena de árboles, de septiembre a junio los estudiantes pasean lo libros y alguna vez, los leen. Dice que en esa calle se puede ver a hombres en celo, buscando por los portales. Dice que no tenga miedo de lo que vendrá, que lo peor y lo mejor en la vida van siempre muy juntitos. Dice, que siempre que una pueda, a la vida hay que mirarla cara a cara. Dice que a veces para eso hay que alzarse un poco y ella, utiliza sus tacones. Por eso cada tarde de domingo, me dice contenta “los tacones y a volar”.


Alpargatas y a volar. La aldea.

Isabel es una hermana de mi madre. Va y viene por los caminos de la aldea. Usa alpargatas, viejas y gastadas. Vive, trabaja, ríe y se enfada también por esos caminos. Nunca se fue. A veces piensa en lo que no conoció por quedarse y sale a la calle, para no arrepentirse. Yo que ya la voy conociendo, se lo noto. Me doy cuenta cuando le entran las ganas de salir y me apresuro a estar cerca. Porque me gusta que me lleve con ella. Porque con ella no me pesan los pies, no me quejo de sed, se me olvida que de andar uno también puede cansarse.

Ella sube por los caminos que llevan al monte, entre chaparros. Desde allí arriba,
me explica en qué momento conoció aquellas tierras. Le gusta una peña alta, junto al barranco pero ahí no quiere subirme. Se calla si le preguntó por qué. Anda por la vera del río, despacio, arranca juncos y absorbe el frescor de su raíz. Me cuenta que si te fijas mucho y no das sombra al agua, puedes ver a las truchas, tranquilas, en el lecho del río. Casi da saltos al ir por los huertos, entre las acequias y se fija en cómo va cada mata, explicándome porque este año han crecido menos las judías. Aunque no debería, camina entre los trigos, como si sus piernas no se enredasen. Mi madre dice que aprendió a ser tan ágil de quien no debía y así de bien le sale. Pero yo defiendo a la tía Isabel diciendo que se equivoca, que son sus alpargatas. Sube airosa y sin fatiga por el camino que lleva a otro pueblo, para contarme que por allí, al amanecer, pasan los rebaños de ovejas. Cuando volvemos a la aldea, siempre terminamos subiendo a la Iglesia. Dice que es porque cada uno tiene en su vida una cuesta, y esa es la suya.

Me ha dicho esta tarde, al bajar la Cuesta de la Iglesia, que me va a regalar unas alpargatas como las suyas. Para ir y venir por los caminos. Para que vaya con ella y también sola. Para que me den ganas de quedarme. O de irme. Riéndose, me ha dicho contenta que cuando las tenga podré volar.



Textos :Belong
Fotografías:"Madrid.Sunday visit to the Archeological Museum" (Blog Babylonphotos).
y " Primavera tras los barrotes"( Blog Hodari ).

2 comentarios:

  1. Hi, it's a very great blog.
    I could tell how much efforts you've taken on it.
    Keep doing!

    ResponderEliminar
  2. Una chica de Mase3 de junio de 2009, 17:42

    Me ha gustado mucho leer "Tacones y a
    volar" y "Alpargatas y a volar".

    ResponderEliminar